Viajamos digitalmente a la otra punta del mundo, concretamente Australia, para descubrir la obra de Sidney Teodoruk, un artista de contrastes.
Usanto todos los dispositivos visuales a su disposición, teje narrativas extrañas empapadas de imágenes y texto dicotómicos, todo ello con grandes áreas de bloques de color. Encontramos objetos nostálgicos de su infancia dispersos al azar en escenarios neoexpresionistas fracturados, que evocan simultáneamente sentimientos de alegría e inquietud.
Confusión, contención y humor definen su arte.